Mostrando entradas con la etiqueta Lérida (Lleida). Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Lérida (Lleida). Mostrar todas las entradas

23 de junio de 2013

Arties y Salardú: pueblos pirenaicos en el Valle de Arán

¿Tienes planes hoy?
Estos días, se nos caía el alma a los pies al ver las imágenes del Valle de Arán (Lérida - Lleida) inundado a causa del desbordamiento del Río Garona, consecuencia del deshielo y las abundantes lluvias de este año 2013, impredecible meteorológicamente hablando. 

Arties (Lérida)

Queremos aprovechar estos momentos para hablar de dos lugares más que, aunque en la televisión, por estas desgraciadas noticias, no se pueda ver su belleza, ésta existe y merecen ser visitados. Vamos a rendir homenaje a los bonitos y encantadores pueblos del Pirineo ilerdense, intentando mostrar, de la mejor manera que se nos ocurre, nuestro apoyo. En su día dedicamos una entrada a Vielha y hoy lo haremos a dos pueblos vecinos Arties y Salardú.

Salardu (Lérida)

Para empezar, deciros de ambos que configuran las típicas imágenes pirenaicas que parecen sacadas de cuentos. Las construcciones en piedra, sus clásicos tejados de pizarra, las ventanas en madera, las calles, todo envuelto por montañas y vegetación, un deleite para la vista. A estas dos localidades acompaña el Río Garona que, si bien en la actualidad ha sido el responsable de las dramáticas consecuencias, habitualmente suele ser un compañero de excepción que contribuye a su belleza.

Arties (Lérida)

Estas dos localidades se encuentan a 3,5km una de la otra. Ambas siendo arquitectónicamente parecidas, y compartiendo entorno natural, tienen su propio encanto.


Arties

Este municipio lo visitamos antes que Salardú, un día que volvíamos al hotel de Vielha después de haber disfrutado del Salto del Pish (Saut det Pish). La verdad es que nos cautivó, disfrutamos de un agradable paseo por sus calles, inmersos en esa sensación que te ofrece el entorno de la montaña. Es el placer de los Pirineos donde el aire es más limpio y la temperatura más fresca.

Arties (Lérida)

La actual distribución de este municipio está marcada por unas inundaciones sufridas en los años 60. De ahí, hoy por hoy, Arties tiene una zona más actual y otra más antigua. En el entorno de su plaza mayor, en el casco antiguo, se pueden encontrar algunos caseríos con sus fachadas características.

Arties (Lérida)

Arties, a pesar de ser un pequeño y no llegar a 600 habitantes, es un lugar atractivo para el turismo,  perfectamente entendible por todo lo que os hemos comentado. De hecho, tiene uno de los paradores del país, que antiguamente fue la casa del descubridor y colonizador de California, ni más ni menos.

Arties (Lérida)

Arties es también conocido por sus osos. Polémicos osos. Hace ya más de 20 años, se confiscaron una pareja de ellos a un circo.

Arties (Lérida)A las afueras del municipio, en un recinto de 600m2, se les trasladó. Después de muchos años, uno de ellos falleció y el otro, afectado, se empezó a mostrar triste. 

Se solicitó a Cabárceno (Cantabria) una compañera para éste, y ahora mismo allí siguen los osos. Se han recogido firmas para buscarles un sitio más apropiado. Si vais, los podréis ver en ese recinto vallado. Personalmente, nosotros compartimos la opinión de que ese lugar no es para ellos.  Nos dio bastante pena verlos encerrados en un lugar tan expuesto y pequeño. 

Durante el paseo os encontrareis con su iglesia románica del s.XI Sta Maria de Arties. (Para los amantes del románico que vayáis por la zona os recomendamos una visita al Valle de Boi).

Pero además Arties dispone de un segundo templo, éste ya gótico, San Juan de Arties).


Salardú

Rodeada por el Río Garona y el Río Unhola encontramos está localidad. La parte más alta del Valle de Aran se ha pasado a llamar Naut Aran, y se considera que este bonito pueblo es su capital.

Salardú (Lérida)

Preside esta localidad la torre octogonal de su iglesia San Andreu de Salardú del s.XIII, de nuevo un edificio románico. En nuestra visita estaba cerrada por obras, pero es conocida por el valor artístico de sus pinturas y su Cristo en madera policromado, recomiendan su visita. 

Salardú (Lérida)
Luego, de nuevo, uno se sumerge en callejuelas desordenadas, donde es difícil olvidar que te encuentras en un pueblo con el encanto pirenaico. Y entre montañas y casonas algo te hace pensar que seguro que hay leyendas en la Historia del lugar.

Por supuesto que sí, la leyenda del Gigante de Garona, que no se ubica concretamente en Salardú, sino en el Valle en si mismo. Hay que remontarse a la época de los romanos, que en plena conquista se topan con un hombre de más de 3 metros que les asusta tremendamente, secuestran a su mujer y a su hija, y él siembra el temor yendo a por ellos para liberarlas, asolando el asentamiento, cogiendo prisioneros y cortándoles la oreja. Algunos habitantes del valle también tenían temor de este gigante al ver la violencia con la que llegaba actuar, y él sintiéndose acorralado llegó un momento que pidió que le mataran con un clavo en su nuca. Su cráneo se convirtió en reliquia y se mantuvo en la iglesia de Garós atribuyéndolo ciertos poderes. 


Tras una leyenda así, aún queda en el ambiente la idea de que puedan quedar escondidos en las montañas gigantes ocultos.

Salardú (Lérida)



Son momentos difíciles en esta zona, con el verano a la vuelta de la esquina, un verano que en los Pirineos es fantástico. Lleno de actividades para todos los gustos, naturaleza, paisajes excepcionales, relax, desconexión de la rutina en un paraíso natural. Esperamos que todo pueda ir resolviéndose poco a poco, sobre todo para sus habitantes que han visto la normalidad de su vida interrumpida, sus casas, su tierra. Nuestro ánimo para ellos. Pero es importante que no se nos queden  en la cabeza esas imágenes de destrucción que vemos en los últimos, los Pirineos Catalanes son una maravilla a los que nosotros vamos a volver…

¿Tienes planes hoy?

Arties (Lérida)



4 de agosto de 2012

Aiguastortes: Lago de San Mauricio (Estany San Maurici) - Lago Ratera (Estany Ratera)

¿Tienes planes hoy?
En nuestra escapada a la provincia de Lérida (Lleida), en uno de los lugares en los que más disfrutamos fue en el Parque Nacional de Aigüestortes, donde realizamos una pequeña excursión.

Aigüestortes: Lago de San Mauricio

De nuevo, una falta de previsión nos evitó poder deleitarnos de un paseo más largo, pero esperamos tener la oportunidad de volver para empaparnos de su majestuosidad. Nuestro itinerario comenzaba en el Lago de San Mauricio (Estany de Sant Maurici) y, aunque la intención era acabar en el refugio de Atmiges, las circunstancias nos obligaron a tener que finalizar en el Lago Ratera (Estany Ratera) y desde allí volver al origen, en total unos 6 km caminados. Un paseo maravilloso.

Aigüestortes

El parque Nacional de Aiguastortes (Parc Natural Aigüestortes) es un enclave natural de excepción, un paisaje pirenaico lleno de estanques y lagos de origen glaciar, formaciones rocosas, y paisajes increíbles que lo convierten en uno de los lugares más valorados de la zona.

Aigüestortes
Existen varias rutas dentro del parque adaptadas a diferentes niveles de dificultad. Un punto de encuentro entre alpinistas, senderistas y amantes del deporte y la naturaleza en general. Aunque si hay un itinerario que ha hecho especialmente popular al Parque Nacional de Aigüestortes son los Carros del Foc, cuyo origen se remonta a finales de los años 80. La leyenda cuenta que un día los guardas de refugios se plantearon recorrer  Pallars-Ribagorca-Aran, con la intención de encontrarse un rato e intercambiar impresiones. A esta hazaña se la denominó Carros del Foc. Desde entonces, muchos se plantean el recorrer la zona. Existen 9 refugios para cubrir la ruta circular de unos 9.000 metros de desnivel en 55 km estimados en total de recorrido, y un tiempo aproximado para realizarla de 5 a 7 días.

Pero nosotros, humildes “paseantes”, lejos de poder plantearnos algo tan emocionante como deben ser esos Carros del Foc, nos conformamos con el privilegio de acercarnos a alguna de las fotografías que el parque natural nos ofrecía generoso.

El acceso al Parque Natural se puede hacer desde dos puntos el pueblo de Boí (en el Valle de Boi) o desde la localidad de Espot. No está permitido el acceso al lugar en vehículo privado, en ambos lugares existen pistas que te permiten acercarte hasta unos cuantos o kilómetros, o bien emplear un servicio público de vehículos 4x4 que te acercan hasta un punto más céntrico del parque.

Y es aquí, donde comienza la descripción de este pequeña excursión que creemos apta para cualquier persona con una forma física que parta de la mediocridad. Nuestro listón no es muy alto.

Optamos por entrar al parque desde Espot utilizando el servicio de 4x4. Se adquieren los tickets en la misma localidad, y cada poco tiempo salen vehículos que, desde allí (Espot), te dejan en la orilla del Lago de San Mauricio. 

Aigüestortes: Lago San Mauricio

Impresionante lugar al que llegas sin tan ni siquiera fatigarte. Estos regalos de la naturaleza deben ser apreciados, las montañas rodeando ese lago podrían ser el mejor salvapantallas de cualquier ordenador, con la diferencia de que aquello se podía pisar, oler y respirar. Ubicado en el fondo de un circo glaciar, es el más popular de los 200 lagos que posee este Parque natural.

A la entrada de este espacio natural os alertaran de la normativa del mismo. Esta prohibido el baño en cualquiera de sus lagos, y por supuesto por sentido común y respeto al entorno natural, no se debe hacer nada que pueda alterar las condiciones ambientales del lugar. El uso de material de montaña, sobretodo cuando las condiciones climáticas son adversas es imprescindible.

Aigüestortes Cascada Ratera
Desde el lago de San Mauricio (Estany de San Maurici) y con el plano que os facilitaran podréis seguir las balizas que indican la ruta que lleva hacia la Cascada Ratera, Lago Ratera (Estany Ratera) y posteriormente Regugio de los Amitges.

Comienza en ese momento un leve ascenso que proporciona, entre luces y sombras, panorámicas del lago que dejamos atrás. El sonido del agua cada vez se escuchaba más fuerte y en apenas veinticinco minutos, a paso tranquilo y con varias paradas, aparece la Cascada Ratera que, a pesar de encontrarnos en el mes de agosto, se presenta generosa con un caudal sonoro.

Desde allí, continuamos el ascenso, entre algunas piedras, siguiendo el camino, cada vez con mas luces y menos sombras y, a pesar de alejarnos de la cascada, el soniquete parece retumbar en nuestros oídos. El agua en todo momento está muy cerca, y es protagonista en esta escapada.


Treinta minutos después, aparece el Lago Ratera (Estany Ratera), menos popular que el Lago de San Mauricio (Estany San Maurici), pero a nosotros el paisaje nos sigue pareciendo espectacular. Es un punto elegido por muchos senderitas para hacer un alto en el camino y sentir lo lejo que parece que estas de cualquier preocupación mundana.

Aigüestortes Lago Ratera

La ruta continua hacia el Refugio de Atmiges, donde el desnivel se endurece un poco. Para nosotros, con mucha pena, llega la hora de dar media vuelta y comenzar el descenso. Mientras caminamos de vuelta, no dejamos de comentar lo excepcional del paisaje que nos rodea.

Días atrás habíamos disfrutado de parajes relajantes y preciosos, como la Ruta de Montgarri desde Pla de Beret, de Artiga de Lin y la Cascada de Uelhs deth joeu, del Salto del Pish… pero quizá fue en Aigüestortes donde definitivamente quedamos enganchados a toda la zona de los Pirineos Ilerdenses.

¿Tienes planes hoy?

Aigüestortes

7 de mayo de 2012

Valle de Bohí (Vall de Boí)

Entre dos
La escapada de hoy alberga una mezcla entre la naturaleza y el arte. En los Pirineos catalanes, Lérida (Lleida), lindando con el Valle de Aran (Val d’Aran)  por un lado y con el Parque Nacional de Aiguastortes por el otro, nos acercamos hasta el Valle de Bohí (Vall de Boí), compuesto de pequeñas localidades con grandes exponentes del arte románico, sus iglesias. Además, en esta zona se encuentra la estación de esquí Boí-Taull Resort de mayor altitud de los Pirineos. 


Las populares protagonistas en esta visita son nueve iglesias románicas que han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y que se encuentran en un excelente estado de conservación. Los municipios en los que se encuentran son Boí, Tahull (2),  Barruera, Coll, Cardet, Durro(2) y Erill la Vall.
En nuestra escapada hicimos parada solo en algunos de ellos, y si algo nos llamó la atención, aparte de lo artísticamente reseñable, son las bonitas estampas que ofrecen estos pueblos típicamente pirenaicos rodeados de la vegetación y montañas.

Coll


Se trata de un pequeño pueblo que no llega a los 50 habitantes. Su iglesia Santa María de la Asunción del s. XII es lo primero que te encuentras al acceder por la carretera que lleva al municipio; pegada a ella, el pequeño cementerio. Es complicado encontrar el templo abierto, está algo apartado de la ruta más turística y las citas deben ser concertadas previamente, hemos leído que siendo de las más pequeñas es una de las más bellas.













Por lo demás, sus pocas calles empedradas son el aperitivo del resto de localidades que nos vamos a encontrar.

Durro


En Durro, nada hace presagiar en su aparcamiento que estamos ante un pueblo que apenas tiene 10 habitantes. Sorprende el  alto campanario de su iglesia del s.XIII, Natividad de Durro (Mare deu Durro), que es imponente. Sus casas están como encajadas entre ellas, en la ladera de la montaña. Las calles y fachadas no desentonan, empedradas, con los tejados de pizarra y la carpintería de madera de sus puertas y ventanas.













A las afueras de la localidad se encuentra la Ermita de San Quirze. De nuevo el entorno colabora a hacer muy atractivo el lugar, el verde después del campanario de la iglesia, es el segundo protagonista. Merece la pena disfrutar de un paseo por las callejuelas en ascenso desde donde obtendréis muy bonitas perspectivas del lugar.

Tahull


Es el municipio más extenso y  poblado. San Clemente de Taull es la primera iglesia que uno se encuentra al llegar por la carretera a la localidad. En este caso, el campanario tiene 6 pisos, y la gente se agolpaba a su alrededor observando la bonita imagen del edificio enclavado entre el verdor del valle. Data del s.XII y tiene gran influencia lombarda. Sus calles, de nuevo, invitan al paseo, llama la atención el colorido de sus balcones con la flores rojizas.


El encanto de este valle se encuentra en todo su conjunto, sus iglesias de campanarios esbeltos que hicieron función de torres de defensa, el acceso al colindante Parque Natural de Aiguastortes, un paraíso para los amantes de la naturaleza en el que nos adentraremos próximamente, el balneario de Caldes de Boí, que goza de unas aguas que proceden de diversas fuentes naturales ricas en minerales, su estación de esquí anteriormente mencionada y el paisaje que todo ello forma... No podemos dejar de recomendaros que, si tenéis oportunidad, lo visitéis.

¿Tienes planes hoy?


7 de febrero de 2012

Ruta Valle de Arán: de la Cascada de Uhels deth Jòeu a Artiga de Lin

Entre dos
En el verano de 2011 hicimos un gran descubrimiento del que ya hemos hablado en otras ocasiones. Nuestra escapada a los Pirineos Catalanes, estableciendo nuestro campamento base en Vielha, nos ofreció tantas sorpresas y un abanico de posibilidades tan amplio para disfrutar del tiempo de ocio, que no descartamos volver este año.

Hoy vamos a compartir una pequeña ruta circular bastante popular y de dificultad baja que no os dejará indiferente. Con tan solo 90 metros de desnivel y apenas 3 kilómetros podréis disfrutar de un paísaje de excepción. Un circo glaciar y una preciosa cascada son los dos grandes protagonistas. Iniciamos el paseo de La Cascada de Uelhs deth Joèu a Artiga de Lin en el Valle de Arán.

Artiga de Lin

Se trata de un paseo apto para realizar por todos los públicos, solamente hay que tener ganas de llenarse la caja torácica de aire limpio y la mirada de paisajes bonitos.

Hay que dirigirse al municipio de Es Bordes, desde allí encontrareis la señalización para aproximarse con el vehículo hasta una zona donde se puede estacionar, si alguien desea ir andando desde el municipio se trata de unos 8 km más o menos.

Cascada de Uelhs deth JoèuComo comentábamos, esta mini-ruta es circular, nosotros la comenzamos desde la zona de la cascada. Desde el área de estacionamiento tan solo hay que descender unos metros para encontrar de forma accesible como brota el agua de la tierra marcando el nacimiento del rio Joeú.

 La cascada de Uhels deth Jóeu resulta impresionante. Pocas veces se encuentra de una manera tan accesible algo similar.  En los años 30, Norbert casteret, a través de un experimento vertiendo una especie de colorante inofensivo en el agua,  descubrió que estas aguas provienen del glaciar del Aneto en el Valle del Bensaque (Huesca) y viajan subterráneas durante unos 4-5 km hasta aparecer con fuerza, casi como si fuera leche, justo en ese punto. Los caprichos de la naturaleza y sus fenómenos permiten que ocurran cosas como estas.

Frente a ella puedes permanecer tanto tiempo como desees, viendo y escuchando como el agua corre infinita. Luego solo hay que cruzar el puente y ascender por una especie de escalones hasta el sendero que marca el camino. La vegetación en esta parte es densa, se nota la humedad al respirar. Es tremendamente relajante encontrar en el mes de agosto paisajes así de verdes.

Valle
Valle de Arán












El paseo resulta gratificante, sin pendiente, el camino dirige hasta la Artiga de Lin, una pradera extensa rodeada por las montañas, que en el momento en el que aparece ante tu vista es un un lugar idílico y de ensueño. Imaginarlo con las cumbres nevadas hace que se presente como una postal en el pensamiento. Cualquier estación en este lugar debe ser perfecta.. el invierno con la nieve, la primavera con el deshielo, el verano con esos cielos intensos y el otoño en tonos rojizos.

Artiga de Lin

Este es un lugar ideal para deleitarse, parar y dejarte embriagar por la naturaleza en todo su esplendor, respirar, extasiarse con un paraje como aquel, inmortalizarlo para cuando desde la distancia, un día como hoy podáis trasladaros con el recuerdo.

Artiga de Lin

Rodeado de altas cumbres pirenaicas como Forcanada, Malh dera Artiga… esta pradera, en la que el tercer domingo de julio se celebra una romería, no es otra corsa que un circo que se convierte en una parada imprescindible si visitáis el Valle de Aran.

Artiga de Lin

Una ruta sencilla, que no llega ni a ruta, prácticamente es un paseo, que permite acercarse a lugares especiales a senderistas y a personas que no acostumbran a adentrarse en la naturaleza, pero que a través de este camino circular podrán divisar paisajes que pocas veces están tan accesibles.

Desde allí y a pocos kilómetros, un montón de lugares más os esperan. De los Pirineos resultan parajes infinitos y que nosotros esperamos seguir descubriendo.

¿Tienes planes hoy?

Cascada de Uelhs deth Joèu

19 de diciembre de 2011

Viella (Vielha)

Entre dos
Viella

La temporada blanca está llamando a la puerta. Las primeras noticias de nevadas en la Península Ibérica han llegado este fin de semana, más tardías que de costumbre por fin han hecho acto de presencia.

Tenemos el privilegio de contar en España con diferentes puntos en los que disfrutar de la nieve, en el sur, en el norte… tanto para los que esquían,  los que quieren aprender, los que quieren jugar o los que simplemente quieren deleitarse con las imágenes que regalan los paisajes blancos.

El pirineo Ilerdense es una de esas zonas valorada por muchos para el esquí, siendo la estación más popular la de Baqueira Beret. Quizá menos conocido son la cantidad de atractivos que ofrece independientes a la nieve o al esquí y que se pueden disfrutar también en otras épocas del año, por ejemplo, el verano si os gusta la naturaleza y el turismo poco masificado. Así que, bien porque seas amante de una cosa, o de otra, o de ambas, el Pirineo catalán tiene mucho que ofrecer.

Viella

El Valle de Arán está salpicado por  pueblos típicos pirenaicos que reposan sobre las laderas de las montaña como, entre otros, Arties y Salardú… 

Hoy vamos a centrarnos en Viella (Vielha). A 14 kilómetros de la estación de esquí, es la capital de la comarca del Valle de Aran y una de las localidades más conocidas de la zona. Resulta un excelente punto de partida para realizar diferentes excursiones. Además ofrece  la imagen típica de un pueblo de montaña,  con el ambiente y la vida que lo convierte en uno de los principales destinos elegidos para el alojamiento turístico y que nosotros recomendamos. 

Viella

El acceso a la villa permite concienciarse del maravilloso lugar en el que se ubica este pueblecito. La carretera comienza a descender, pasando al lado del Parador del Nacional de Turismo de Viella, desde el que se obtienen unas vistas panorámicas de la zona, hasta llegar al núcleo urbano. La carretera de golpe se convierte en una de las calles del pueblo que lo atraviesa con dirección hacia el Sur de Francia (a unos 10 km, aproximadamente)

Viella
Es característico de esta zona el románico, principalmente la zona del Valle del Boi (Val de Boi) al que nos acercaremos en este blog próximamente.  En la plaza principal del municipio es protagonista la Iglesia de San Miquel, del s XII-XIII. Este templo, de origen medieval también, se viste de románico con guiños al gótico con su torre octogonal. En su interior alberga un cristo en madera tallado y policromado de gran valor artístico.

Las callejuelas estrechas se enredan entre sí como si fueran nervios y antes de que te des cuenta te han sacado del meollo para devolverte a la naturaleza. El verde envuelve la localidad. Desde la vaguada en la que se encuentra Viella, montones de laderas se visten de árboles tapizando el terreno de ese color.

A principios del mes de agosto se celebra el mercado medieval. En una de sus plazas montones de quioscos engalanados con lonas, escudos, y comerciantes caracterizados convierten el municipio en un festin de olores, colores y sonidos que te trasladan a otros siglos.


El Rio Garona atraviesa el lugar, entre muros y sobre piedras contribuye a ensalzar el carácter atrayente de Viella.  La niebla, que generalmente resulta incómoda, aquí se convierte en complíce a primera hora de la mañana de paisajes insólitos para los que estamos habitualmente lejos de las montañas.

Viella Viella












Viella

Dispone de multitud de lugares de restauración, tiendas y servicios. Viella es un municipio en el que el turismo tiene un protagonismo especial, pero no exclusivo. Es una de esas localidades donde la gente mora, tiene su residencia, y eso se nota. Es un lugar en el que no echareis en falta nada. Esto, junto con su ubicación privilegiada en la zona, cerca de la estación de esquí, del Parque Natural de Aigüastortes, del Valle del Boi, del sur de Francia, lo convierten en un destino ideal si quieres hacer una escapada a la provincia de Lérida (Lleida) y llenarte los pulmones de aire limpio, la vista  de colores, de belleza… Un turismo apto para todos los públicos.

¿Tienes planes hoy?

Viella


16 de septiembre de 2011

Ruta: Pla de Beret - Santuario de Montgarri

Entre dos

Santuario de Montgarri

Los Pirineos Catalanes y, más concretamente, el Valle de Arán en Lérida (Lleida), han sido todo un descubrimiento para nosotros. Una experiencia totalmente revitalizante y depuradora de cuerpo y mente. Y lo mejor, adictiva, porque ya estamos pensando en que queremos volver.

Elegir cuál sería el primer destino de los visitados sobre el que hablaríamos ha sido complicado, entre los pueblos típicamente pirenaicos (Vielha, Salardú, Arties, Valle de Boí) y las excursiones a ese entorno natural (Parque Nacional de Aigüestortes, Cascada de Uhels de Joeu y Artiga de Lin, Salto del Pish...),  todos ellos dotados de recursos impresionantes, nos hemos decantado por un paseo que une Pla de Beret con el Santuario de Montgarri y que durante 12 km (ida y vuelta) te adentra en un paisaje de excepción.

Santuario de Montgarri

Pla de Beret se encuentra a unos 1.860 metros de altitud. Los remontes de la Estación de Baqueira Beret, en el mes de agosto, estaban vacios y, lo que en invierno debe ser un manto de nieve, esquies, gorros, gafas y bufandas, en verano se había convertido en una amplia y vasta extensión de pastos, en el que se escuchaban resonar numerosos cencerros y relinchos del ganado vacuno y equino que paseaba y descansaba con total tranquilidad.


Desde Pla de Beret parte la ruta. Se debe estacionar el vehículo en el amplio aparcamiento que hay en la explanada. Nosotros realizamos la ruta por la tarde, por lo que en el trayecto no encontramos prácticamente a nadie. Fue una sensación muy especial sentirte tan solo en la montaña.

La llegada hasta Pla de Beret a través del puerto de la Bonaigua puede tornarse en algún momento inquietante. Acostumbra la niebla a jugar con nuestras intenciones y volvernos inseguros acerca de si deberíamos, o no, seguir ascendiendo hasta Pla de Beret. Y es que a las nubes les gusta quedarse inmóviles a medio camino, de manera que taponan el ascenso. Dos intentos hicimos por subir, y en el segundo fue en el que descubrimos que, a pesar del encapotamiento inicial, las cumbres se encontraban despejadas y soleadas. Esto al final sumaba puntos, porque  ¿A quién no le gusta viajar sobre las nubes?

Una vez aparcados es fácil desorientarse… ¿Por dónde empieza la ruta?

Santuario de Montgarri

El acceso al camino que dirige al Santuario de Montgarri, donde también hay un refugio y a pocos metros los restos de un pueblo abandonado en los años 60, se puede realizar bien por una pista habilitada para vehículos 4x4, o bien por una senda para peatones.

Para aquellos que quieran realizar la ruta en coche, deberán hacerlo en un vehículo apropiado (4x4) por la senda habilitada para los mismos. No se recomienda, si no es de estas características circular por el camino, aunque nos consta que hay quien lo hizo y llegó. La senda se encuentra habilitada para vehículos de esta tipología solo a partir del mes de mayo, y lo que no recordamos es hasta qué mes del otoño. Nosotros íbamos con la intención de dar un paseo y optamos por hacer el camino a pie siguiendo la senda libre de tráfico.

La mejor forma de encontrar un lugar de toda la vida ha sido preguntando. Y no será porque no llevábamos todo bien apuntado, pero una vez allí, entre tantísimas praderas, la vista se perdía entre llanos y cuernos...

Santuario de Montgarri

Según se llega al Pla, hay que dirigirse al aparcamiento, concretamente, al fondo a la izquierda. Ahí comienza la senda…  Es difícil ser más explícito en un lugar donde no tenemos más referencias en nuestra memoria que pastos y caballos, y potros, y más pastos… y vacas y más llanuras…

Desde ese punto no hay pérdida, únicamente se trata de seguir la senda marcada por el paso de tantas personas, que se adentra en bosques de pino negro, que deja a los lados pequeños arroyos, y que discurre al lado del Río Noguera Pallaresa que nace en el propio Pla de Beret.

Santuario de Montgarri

El desnivel de esta ruta es aproximadamente, de Pla de Beret a Montgarri, de unos 250 metros de bajada a la ida y a la vuelta de subida. Es una ruta que no plantea ningún tipo de dificultad y que, sin contar con paradas, se haría de dos horas y media a tres.

La ruta puede hacerse bien de forma circular, descendiendo por la pista peatonal y ascendiendo por la pista por la que circulan vehículos todo terreno, o bien, como hicimos nosotros, ida y vuelta por la senda peatonal. Sea como fuere, por ambos caminos la distancia es similar.

Santuario de Montgarri

Discurre entre más y más laderas, naturaleza que al fondo está decorada por el perfil de montañas y, en aquella tarde de agosto, un sol justiciero que hacía que el verde fuera más verde y el cielo más azul. Costaba creer que a tan solo unos metros la niebla cubría todo el paisaje…

Y mientras caminas hacia allí, al echar la vista atrás ves como el dibujo del camino aparece y se esconde entre pequeños desniveles, dejando la estela del lugar del que partes.

En ese momento, en el que acompañan los ruidos de la naturaleza, es en el que es importante saber hacia que lugar nos dirigimos.

Santuario de Montgarri

El origen del Santuario de Montgarri data del siglo XII, cuando a un pastor se le apareció en aquel lugar la virgen de forma repetida. La actual apariencia arquitectónica de la construcción, en cambio, es del s.XVI.

Montgarri, en 2009, apenas tenía censadas 6 personas. Considerado uno, si no el que más, de los pueblos con una temperatura media anual más baja de toda España, y ubicado en un enclave excepcional para la vista, pero complicado para la supervivencia, en los años 60 se vio condenado al abandono. Hoy quedan unas simbólicas bordas y la protección por parte de la Generalitat del espacio que conformaba este núcleo rural, que durante años sobrevivió de su agricultura y ganadería.

Santuario de Montgarri
Al lado del Santuario está el refugio, y desde unos metros antes de la llegada al mismo se dispone de una panorámica bucólica. Como en una vaguada que forma el terreno se asienta, acariciado por el Río Noguera Pallaresa, entre las montañas y los pastos, este “especial lugar”.

La luz de la tarde le daba un aire más nostálgico al paisaje pirenaico. Alguna persona descansaba con los pies en el río, pero había muy poco tránsito. Y de nuevo la paz era la protagonista.

Parece ser, por lo que hemos leído, que esta es una ruta muy transitada. Desde nuestra experiencia este pasado verano, nosotros no nos encontramos nada más que a la ida con alguna persona que ya regresaba, y a la vuelta con tres personas que iban. Quizá el realizarla por la tarde pudo colaborar a que la experiencia no se convirtiera en una travesía de multitudes, no lo sabemos, pero si no fuera por haberlo escuchado antes, pensaríamos que era una ruta “casi desconocida para el mundo” (y no es así).

Y tras el disfrute solo quedaba la vuelta, que como os comentamos, realizamos por el mismo camino que fuimos. El ligero desnivel, que se da en los primeros metros de vuelta principalmente, se hace algo más pesado, pero mientras das cada paso el santuario se va haciendo chiquitito, chiquitito, y el río parece un fino hilo reflejo de un sol que cae…

Al deshacer los pasos y dejar a tu espalda Montgarri, de nuevo, las laderas y los bosques visten el camino hasta empezar a escucharse los cencerros que dejamos al principio de nuestra excursión, avisándonos que ya estamos llegando a Pla de Beret.

Santuario de Montgarri

Las nubes han subido, y la niebla se muestra mucho más cercana. Al atardecer, y al mirar a nuestro alrededor, aquello parece el Cielo, a pesar de que las leyendas digan que en Pla de Beret se celebraron múltiples akelarres. Todo lo que le rodea nada tiene que ver con un escenario macabro… es un paisaje idílico donde apetece llenarse los pulmones del aire fresco de la montaña.

Santuario de Montgarri

Al fondo queda escondido el Santuario de Montgarri, pero te llevas la experiencia de una tarde maravillosa de paseo, fotografía, charla, deleite, placer y, porque no decirlo, cansancio, pero del que gusta, de ese que cuando llegas a cenar, tras una ducha, se te llena la boca y se te dibuja una sonrisa en la cara más sonrosada de lo habitual, y dices… “Oye, pues estoy cansada ¿Eh?” - y quieres más… - “¿Dónde vamos mañana?”


¿Tienes planes hoy?

Santuario de Montgarri



Coprights @ 2016, Blogger Templates Designed By Templateism y modificado y adaptado por ¿Tienes planes hoy?| Distributed By Gooyaabi Templates

¿Tienes planes hoy? Tiene todos los Derechos de Autor de Contenido Reservados (imágenes y texto)